¿Por qué deciciste tomar esa atajo hacia el infierno? Donde todo es más gris, donde todos es invierno.

domingo, 25 de julio de 2010

Ya no me encuentro preguntando sobre amor, por fin no hay nada que pretenda no saber, entiendo que no hay relación entre amar y envejecer. Ya no me encuentro preguntando como dar, por fin comparto por el miedo de perder el milagro de tus caricias llegando el amanecer. Distingo excusa y resultado y hoy elijo estar con vos. Ya no me encuetro figurando en el "verás" por fin no veo más que lo que va a venir, pago el precio de tenerte, darte amor y ser feliz. Ya no me encuetro contestando un ¿yo que sé? por fin entiendo que en tus redes yo caí. Ya no me encuentro preguntandome ¿por qué? por fin entiendo de una vez el porque sí, porque te ví,te dejé entrar,cerré la puerta y te elegí. Porque esos dos faroles pueden hacer que si estoy fané, las pequeñas cosas se bañen del brillo de esa ternura que transmitís cuando me mirás. Hoy puedo entender que te gusta el té, que odiás el café, que no querés rosas, que a pesar del vértigo no hay altura que impida que me saque el disfráz. Tirando a matar,dandonos changüí, puro razonar, puro frenesí. Se escribe así nuestra historia: que funcione o no, que esté bien o mal, vivirlo con vos para mi es la gloria. Sin escatimar, sin darnos de más, sin acelerar, sin tirar para atrás, siempre fue así nuestro asunto: le falta de acá, le sobra de allá, retocandolo, pero siempre juntos...

No hay comentarios:

Publicar un comentario

El por qué de métodos catárticos.

Métodos catárticos:

¿Por qué el nombre? Por una nota como tantas otras, dedicada a Sol. Pero esta nota fue especial, no sé que tenía pero la amé. Era una nota normal, pero me marcó. Quizás cómo la conté o cómo la sentí en ese momento.
La nota esa es casi perfecta: Cuenta sobre lo mismo de siempre. Tus vueltas, sabelo. Histérica, insegura, desconfiada, se podrían usar para describirte.
Y yo ciego como el mejor, siempre la misma piedra, siempre.

Por esa nota, el nombre de mi blog.
¿Con qué necesidad?
¿Por qué?
¿Qué ganaste?
¿Tanta maldad era necesaria?